Las enfermedades asociadas al corazón causan más muertes en un año que los accidentes automovilísticos. Tan solo en EE. UU mueren, al menos en un día, 2.200 personas a causa de enfermedades cardiovasculares.
Una cifra alarmante que sin duda hace que nos preocupemos por mantener un corazón saludable. Para ello se deben seguir una serie de hábitos que permitan la disminución de afecciones coronarias.
El corazón es uno de los órganos más importantes de nuestro cuerpo. Es el motor que ayuda a bombear la sangre para que lleve nutrientes a todos los órganos, células y tejidos del organismo.
Los alimentos ricos en grasas saturadas, azucarados o muy salados impactan de manera negativa los vasos sanguíneos y las arterias. Esto trae como consecuencia, enfermedades como la insuficiencia cardiaca, presión arterial, infarto de miocardio y accidentes cerebrovasculares, etc.
Alimentación saludable y equilibrada
Hay un dicho que dice “El pez muere por la boca” y es totalmente cierto, especialmente para aplicarlo a nuestros hábitos alimenticios. Vivimos en una sociedad donde el consumo de carbohidratos vacíos, el exceso de grasas y azúcares es normal.
Sin embargo, debemos hacer un alto a las comidas chatarras e incluir alimentos que aporten nutrientes al organismo.
Los principales indicios que se asocian a las enfermedades coronarias son, el colesterol, los triglicéridos y la presión arterial. Todos estos factores son provocados por los malos hábitos alimenticios.
La inclusión de frutas, vegetales verdes, hortalizas, oleaginosas y legumbres, son un buen remedio para combatir los factores de riesgo. Es ideal, abandonar las frituras y consumir alimentos asados o la plancha. Así como disminuir el consumo de dulces y alimentos muy salados.
Tener un buen descanso
El descanso siempre se asocia a la buena salud, y por supuesto también es recomendable para mantener un corazón saludable. Dormir bien en el periodo de horas adecuadas disminuye el riesgo de padecer un infarto de miocardio.
Los individuos que sufren de insomnio o tardan largos periodos de tiempo en conciliar el sueño, tienen hasta un 45% de posibilidades de sufrir un infarto. El sueño es importante porque renueva las energías, regenera los órganos y ayuda a mantener los nervios estables.
Para conseguir una buena jornada de sueño profundo, es ideal cultivar buenos hábitos, como dejar las pantallas azules. Cenar liviano y abandonar el sedentarismo, etc.
La ansiedad y la salud emocional impactan el corazón
Un factor determinante en las enfermedades cardiovasculares son la ansiedad y las emociones negativas, estas afectan directamente el corazón. Por lo cual, la salud emocional también es crucial para mantener un corazón saludable.
Muchas afecciones del corazón pueden aparecer debido a la ansiedad, el estrés, y los constantes episodios de ira o tristeza. Incluso algunos estudios afirman, que estos episodios duran hasta dos horas después de haberlos experimentado.
La ansiedad afecta directamente al corazón, ya que el cortisol se apodera completamente del organismo. Entorpeciendo funciones necesarias como la buena circulación de la sangre, aumentando la coagulación, la presión arterial, y la frecuencia cardiaca. Además de endurecer los vasos sanguíneos.
Para reducir la ansiedad es indispensable acudir a un especialista de salud mental, asimismo, incluir hábitos como la meditación.
Practicar ejercicio físico
El ejercicio físico es el mejor aliado para mantener un corazón saludable, ayuda a bombear la sangre y provee al organismo de bienestar general. Tal, como, reducir el sobrepeso, la diabetes, la angina de pecho, la presión arterial y los infartos de miocardio, etc.
También tiene un efecto positivo en la salud mental, disminuyendo la ansiedad crónica y el estrés. Se recomienda practicar regularmente las actividades físicas para que el organismo las pueda asimilar y obtener resultados positivos.
Los ejercicios cardiovasculares, como correr, nadar, caminar, y andar en bicicleta, son los más recomendables para el corazón. Porque ayudan a bombear la sangre, favoreciendo en gran medida la salud.
Abandonar el consumo de alcohol y cigarrillo
El consumo de alcohol y el hábito del cigarrillo generan efectos nocivos y perjudiciales para la salud del corazón. Un fumador activo corre el riesgo de padecer trombosis, además reduce las arterias, generando que el corazón no bombee la sangre de manera adecuada.
Asimismo, produce otros efectos negativos en la sangre y la salud del corazón, aumentando las posibilidades de un infarto.
Por su parte, el alcohol contamina completamente la sangre, siendo un factor determinante en la aparición de enfermedades cardiovasculares. Los tomadores consuetudinarios tienen una mayor probabilidad a padecer un infarto, así como otras enfermedades.
Se recomienda suspender el hábito del cigarrillo y tabaco, al igual que sus derivados, para aumentar la salud del corazón. Asimismo, disminuir el consumo de alcohol para mantener un corazón saludable.
Chequearse periódicamente
Un chequeo de manera periódica puede dar a conocer riesgos y avances de alguna afección del corazón. Es importante acudir a especialistas regularmente, aun así, si no se padece de algún síntoma. De manera que se pueda descartar o prevenir enfermedades cardiacas, diabetes, colesterol e hipertensión.
Las personas de más de 40 años de edad, deben realizarse de manera periódica análisis de sangre. Especialmente si cuentan con antecedentes genéticos asociados a enfermedades del corazón.
Un chequeo anual puede hacer la diferencia en la manifestación y prevención de enfermedades cardiovasculares.
Controlar la presión arterial y el colesterol
Una subida repentina del colesterol puede afectar terriblemente la salud del corazón. Por lo que es fundamental mantenerlo a raya, disminuyendo el consumo de grasas saturadas y carbohidratos vacíos.
La presión arterial es conocida por dañar directamente al corazón de una forma silenciosa, ya que en un principio el paciente no muestra síntomas. Si embargo, cuando se desestabiliza de manera repentina, puede originar inclusive un infarto de miocardio.
Es esencial chequearse la presión periódicamente para conocer sus niveles, especialmente en pacientes con tendencias a este síntoma.
Controlar la glucosa
La diabetes está asociada a las enfermedades coronarias, tanto, que el 80% de los pacientes con altos niveles de azúcar en sangre fallecen por enfermedades cardiovasculares.
Es importante que los individuos que sufren esta afección puedan controlar la glucosa en sangre, con los alimentos que consumen diariamente. De manera que puedan mantener un corazón saludable para llevar un estilo de vida pleno.
Si quieres comenzar a cuidar tu corazón, busca productos naturales como Incasol, un suplemento dietético orgánico. El cual favorece en la circulación sanguínea, además de reducir el colesterol y la presión arterial.
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